Succubi, como la joven princesa Astarotte "Lotte" Ygvar, requiere la semilla de vida de los hombres para sobrevivir, reponer su magia y continuar el linaje real del reino mágico. Esto significa que se necesita succubi para mantener a mano un harén de hombres. Irónicamente, Lotte desprecia a los hombres, lo que pondrá en riesgo su vida una vez que madure. Para convencerla de cumplir con sus deberes, una de sus asistentes, Judith Snorrevik, va al reino humano para encontrar un hombre humano a quien Lotte pueda tolerar.

Judith regresa con Naoya Touhara, de 23 años, un padre soltero que desafortunadamente deja a su hija, Asuha, en el reino humano. Como primer miembro del harén de Lotte, Naoya se adapta rápidamente a este nuevo entorno, sirviendo a la princesa para hacerla feliz, en lugar de verla con intención sexual. Desafortunadamente, cuando a su hija se le permite llegar al reino mágico, la relación de Naoya empeora rápidamente con Lotte. Aun así, se esfuerza por arreglar su relación.

Sin embargo, pronto queda claro que la presencia de Naoya en el reino mágico es más que una mera coincidencia. A medida que desarrolla su vínculo con Lotte, el destino comienza a unir las conexiones que lo unen a él y a todos los demás en este mundo encantador.